#04 Chamba-Dzana (HOFF)
Cuando llegamos por primera vez a Chamba-Dzana, otro pequeño pueblo en la región de Benga, nos impresionó mucho ver lo feliz que estaba esta comunidad, cuánta energía tenían todos y con qué calidez nos recibieron. Vivían al límite, pero aún así tenían una perspectiva sorprendentemente positiva y trataban de aprovechar cada pequeño detalle.
Lo triste vino cuando se juntaron todos para mostrarnos su fuente de agua: después de caminar 1,5 km, encontramos un pozo de 2m 2 Agujero sin entrada ni salida. No había ningún río cercano y estarían ligados a las condiciones climáticas, ya que el área se secaría constantemente y su suministro de agua desaparecería. Teniendo en cuenta todos estos insumos, uno puede imaginarse la calidad del agua: estaba toda marrón y sucia, llena de insectos y en cualquier caso, potable.
Vivían al límite, pero aún así tenían una perspectiva sorprendentemente positiva y trataban de aprovechar cada pequeño detalle.
Ese pequeño pozo de agua fue su única opción durante muchos años y en consecuencia, se bañaban en él resultando en muchos problemas de piel. Con el tiempo, al carecer de recursos médicos, las enfermedades de la piel se convirtieron en un gran problema que ponía en peligro la vida de muchos de los habitantes de Chamba-Dzana.
Una vez que tuvimos claro que queríamos ayudarles, nuestros amigos de HOFF, marca española de zapatillas, nos mostraron su interés en unirse a nosotros y formar parte de este proyecto. Movidos por el espíritu comunitario, el amor y el cuidado que sentimos allí, todos se unieron para financiar este pozo de agua.
El pozo de Chamba-Dzana se construyó en febrero de 2020, justo antes de que estallara la pandemia de COVID-19. Desafortunadamente, debido al bloqueo global no pudimos inaugurar el pozo y celebrarlo con su gente. Sin embargo, nuestros socios nos han informado que sus habitantes han visto sus vidas mejorar significativamente gracias a esta contribución.